Narra las desventuras de Lalo Padilla, un seductor profesional que de la noche a la mañana se convierte en Lola por culpa de un maleficio. Tendrá entonces que afrontar su nuevo cuerpo y su nueva sensibilidad. Sergio, el director creativo de la agencia donde trabaja, no tiene nada en común con Lalo, y no acaba de encajar en una oficina donde reina el machismo. En K-Roll viven en vilo a la espera de que una importante multinacional invierta en el negocio. Aguirre, el presidente, confía plenamente en Lalo para dejar impresionados a los inversores. Lo malo es que Romina, su última amante, viéndose abandonada, recurre a un hechizo que convierte a Lalo en una despampanante mujer.